REDACCIÓN.
Amazon, el gigante del comercio electrónico y los servicios de transmisión, se encuentra en medio de una demanda legal debido a su reciente incremento en las tarifas de Prime Video. Un grupo de suscriptores ha presentado una demanda alegando que esta acción viola la ley del consumidor y afecta a quienes tenían suscripciones anuales.
El aumento de tarifas y la controversia
En 2023, Amazon anunció cambios significativos en su plataforma de streaming, Prime Video. A finales de enero, lanzaron oficialmente un nivel con publicidad en Estados Unidos, convirtiéndolo en el predeterminado para todos los suscriptores. Ahora, si alguien desea ver contenido sin anuncios, se le cobra una tarifa adicional de $2.99 dólares al mes. Sin embargo, algunos usuarios consideran que este cambio es engañoso y viola las leyes del consumidor.
La controversia radica en que los precios se incrementaron sin previo aviso, afectando a quienes tenían contratos anuales. Estos suscriptores se vieron obligados a ver anuncios, a pesar de que esto no estaba especificado cuando contrataron el servicio. La demanda argumenta que Amazon no cumplió con su deber de informar adecuadamente a los consumidores sobre estos cambios.
La demanda y sus reclamaciones
Los demandantes buscan al menos 5 millones de dólares en compensación y una orden judicial que prohíba a Amazon participar en más conductas engañosas con los usuarios que se suscribieron a Prime Video antes del 28 de diciembre de 2023. El objetivo es que se respeten los términos originales del contrato y se evite cualquier modificación unilateral sin notificación previa.
Esta no es la primera vez que Amazon enfrenta problemas relacionados con competencia desleal y publicidad engañosa. En 2023, también se enfrentaron a una demanda por parte de la Comisión Federal de Comercio por engañar a los consumidores al registrarlos en su Servicio Prime y luego dificultar la cancelación de sus suscripciones.
La demanda contra Prime Video destaca la importancia de la transparencia y la comunicación clara con los consumidores. Los usuarios confían en que las empresas cumplan con los términos acordados y brinden un servicio justo. Amazon deberá enfrentar las consecuencias legales y demostrar que respeta los derechos de sus suscriptores.