REDACCIÓN.
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Ciudad de México, 7 de marzo del 2024. La Ciudad de México, hogar de cerca de 25 millones de habitantes, enfrenta una crisis ambiental sin precedentes. En un fin de semana reciente, los niveles de contaminación por partículas suspendidas alcanzaron cifras alarmantes, superando límites que no se habían visto en años.
¿Qué son las partículas suspendidas y por qué son peligrosas?
Las partículas suspendidas son pequeñas partículas sólidas o líquidas presentes en el aire. Provienen principalmente de la quema de combustibles fósiles, como los gases de escape de los vehículos y las emisiones industriales. Estas partículas pueden ser perjudiciales para la salud, especialmente a nivel respiratorio y cardiovascular. En la Ciudad de México, donde circulan alrededor de 5 millones 400 mil coches diariamente, la alta concentración poblacional y el uso constante de vehículos particulares agravan el problema.
El impacto en la salud
Este fin de semana, los niveles de partículas PM10 alcanzaron 581 puntos en algunas zonas de la capital mexicana. Para ponerlo en perspectiva, el límite oficial aceptable es de 100 puntos. Aunque no se declaró una alerta formal de contingencia, estas cifras son preocupantes. Las partículas suspendidas están asociadas con un aumento en las visitas a salas de emergencia debido a problemas respiratorios y cardiovasculares.
¿Por qué ocurre esta crisis?
La temporada de ozono, que se desarrolla entre febrero y junio, es una de las principales causas. Durante este período, se registran altas temperaturas, poca nubosidad y vientos débiles, lo que favorece la generación y acumulación de ozono. Además, la topografía de la ciudad, coronada por volcanes, dificulta la dispersión de partículas suspendidas.
Medidas y desafíos
El Sistema de Monitoreo Atmosférico (SIMAT) mide diariamente los contaminantes en el aire. Sin embargo, las medidas actuales parecen insuficientes para abordar la magnitud del problema. La Ciudad de México ha enfrentado contingencias ambientales en repetidas ocasiones, y la lucha contra la polución sigue siendo un desafío persistente.
Recomendaciones durante la contingencia
Para proteger nuestra salud y reducir la exposición a las partículas suspendidas, se sugiere:
En resumen, la contaminación histórica en la Ciudad de México requiere una acción urgente. La salud de sus habitantes y la preservación del medio ambiente están en juego. Es hora de tomar medidas más efectivas para proteger nuestra ciudad y a quienes la llaman hogar.