Trump amenaza a Apple con aranceles si no fabrica el iPhone en EE.UU.

Por Mario Victorino

El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha advertido que impondrá un arancel del 25% a los iPhone si Apple no traslada su producción al país. La medida forma parte de su estrategia para fortalecer la manufactura estadounidense y reducir la dependencia de mercados como China e India, donde actualmente se ensamblan estos dispositivos.

Presión a Apple y posibles consecuencias

A través de su plataforma Truth Social, Trump reiteró que ha solicitado a Tim Cook, CEO de Apple, que el iPhone sea fabricado en territorio estadounidense. Según el exmandatario, esto permitiría generar empleo y reducir la influencia de China en la industria tecnológica.

Sin embargo, la imposición de un arancel podría impactar el precio final de los iPhone en EE.UU., generando un posible incremento en costos para los consumidores. Analistas advierten que Apple podría trasladar parte de ese impuesto a los compradores, afectando su competitividad en el mercado.

Apple y su estrategia de producción

Apple ha tomado medidas para diversificar su producción fuera de China, trasladando parte del ensamblaje del iPhone a India y Vietnam. La compañía busca reducir riesgos ante la guerra comercial entre EE.UU. y China, pero Trump insiste en que la empresa debería garantizar que sus productos vendidos en EE.UU. sean fabricados exclusivamente en el país.

Hasta el momento, Apple no ha respondido directamente a las declaraciones de Trump, pero expertos del sector tecnológico consideran que un posible arancel obligaría a la empresa a reevaluar su estrategia global de fabricación.

Impacto en la economía y el mercado tecnológico

La advertencia de Trump se suma a sus propuestas de imponer aranceles del 10% a todas las importaciones si regresa a la presidencia en 2025. Este enfoque proteccionista podría redefinir el mercado tecnológico y afectar a gigantes como Tesla, Microsoft y Nvidia, cuyos componentes también dependen de la manufactura extranjera.

Mientras tanto, los consumidores y las empresas tecnológicas siguen de cerca las declaraciones de Trump, ante el posible impacto que estas medidas puedan tener en el precio y disponibilidad de dispositivos electrónicos en EE.UU..