SAT vigila depósitos en efectivo: ¿cuándo pueden investigarte y qué riesgos enfrentas?

¿Sabías que el SAT puede investigar tus depósitos en efectivo? Descubre los límites fiscales, riesgos y cómo evitar sanciones por movimientos bancarios sospechosos en México.

masclaro.mx
today 02/10/2025

El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha intensificado su vigilancia sobre los depósitos en efectivo realizados en cuentas bancarias personales y empresariales. Aunque muchos contribuyentes creen que sus movimientos bancarios son privados, la realidad es que ciertos montos pueden activar alertas fiscales y derivar en auditorías, sanciones o incluso investigaciones por presunta evasión.


¿Por qué el SAT puede revisar tus depósitos?

La autoridad fiscal mexicana tiene facultades para acceder a información bancaria cuando detecta inconsistencias entre los ingresos declarados y los depósitos realizados. Esto se basa en el principio de discrepancia fiscal, que permite al SAT presumir ingresos no reportados si el contribuyente gasta o deposita más de lo que oficialmente gana.

Los depósitos en efectivo son especialmente sensibles, ya que no siempre están respaldados por facturas o comprobantes fiscales. Si el SAT identifica movimientos que superan ciertos umbrales, puede solicitar aclaraciones, iniciar auditorías o aplicar sanciones.


¿Cuál es el límite que puede activar una revisión?

Aunque no existe un monto único que automáticamente detone una investigación, los depósitos en efectivo que superan los 15,000 pesos mensuales suelen ser considerados de riesgo. Este umbral está vinculado a las obligaciones de las instituciones financieras de reportar operaciones relevantes ante la autoridad fiscal.

Además, si el contribuyente no está registrado en el RFC, no presenta declaraciones o no tiene actividad económica formal, cualquier depósito significativo puede levantar sospechas.


¿Qué tipo de depósitos están bajo la lupa?

El SAT puede revisar:

  • Depósitos en efectivo realizados en ventanilla o cajeros automáticos.
  • Transferencias entre cuentas propias si no están justificadas.
  • Ingresos por ventas sin facturación.
  • Préstamos informales no documentados.
  • Aportaciones de terceros sin contrato o respaldo legal.

Incluso si el dinero proviene de familiares o amigos, es fundamental contar con pruebas que acrediten el origen lícito del recurso.


¿Qué consecuencias puede haber?

Si el SAT determina que los depósitos en efectivo constituyen ingresos no declarados, puede:

  • Exigir el pago de impuestos omitidos.
  • Aplicar multas por omisión o evasión.
  • Iniciar auditorías más profundas.
  • Bloquear cuentas bancarias en casos extremos.
  • Presentar denuncias ante la Fiscalía General de la República si hay indicios de delitos fiscales.


¿Cómo protegerte?

Para evitar problemas con el SAT, considera estas recomendaciones:

  • Declara todos tus ingresos, incluso los que recibes en efectivo.
  • Solicita facturas por tus ventas o servicios.
  • Formaliza préstamos o donaciones con contratos.
  • Evita manejar grandes cantidades de efectivo sin respaldo documental.
  • Consulta con un contador o asesor fiscal si tienes dudas.


¿El SAT puede revisar cualquier cuenta?

Sí. Desde 2014, las instituciones financieras están obligadas a reportar al SAT operaciones relevantes, incluyendo depósitos en efectivo, transferencias internacionales y movimientos inusuales. Aunque no todas las cuentas son revisadas de forma automática, el SAT puede solicitar información específica si detecta inconsistencias.

 

Los depósitos en efectivo no son invisibles para el SAT. Aunque tener dinero en efectivo no es ilegal, manejarlo sin respaldo fiscal puede generar problemas serios. La transparencia, la documentación y el cumplimiento de obligaciones fiscales son clave para evitar sanciones y proteger tu patrimonio.